Sección Enlaces

He inaugurado la sección de enlaces, la puedes encontrar justo encima de 'Post Recientes'. Y la verdad es que la he inaugurado con un enlace excelente, se trada del blog de Adrián, un gran amigo y mejor persona. Es complicado definir el tema de su blog, mejor échale un vistazo, vale la pena.

¿Cuestión de suerte?

A veces gano, a veces pierdo. A veces tengo buenas cartas, a veces no. Empecé con 80€ y ya tengo menos de 70. O éste no es el camino o estoy haciendo algo muy mal.

Según los expertos, no se puede juzgar en un día si eres bueno o no, dicen que como mínimo esperes al mes para ver si has ganado o perdido. Ciertamente mi saldo ahora fluctúa con mucha rapidez. Esperaré un mes antes de decidir si el Poker es el sendero que me llevará a lograr este particular reto.

Pero algo he aprendido, ya juego mucho mejor de lo que lo hacía hace una semana. Los libros ayudan, pero no son sustitutos de las partidas. Jugar con gente que es mejor que tú te hace aprender... pero tienes que pagar las clases.

Creo que el secreto para ganar pasta es jugar con gente que sea mala... más mala que tú. Voy a buscar a esa gente o me quedaré sin nada.

He oído que en Pacific Poker están los peores jugadores de todo Internet. Me daré una vuelta a ver si es verdad.

La frivolidad de un día cualquiera

A la música de Piano Man (de Billy Joel) leo las noticias de la semana... un hombre mata a su mujer y a su hija embarazada, escopeta en mano. Mientras tanto el ejercito israelí bombardea el Líbano impunemente, sin tener cuidado si los objetivos son militares o civiles, por si fuera poco, varias víctimas presentan quemaduras de fósforo blanco, bombas prohíbidas.

Y yo aquí, ajeno y consciente de todo esto, escribiendo unas tristes hazañas en unas partidas de cartas. No puedo evitar sentirme frívolo. No puedo cambiar el mundo, pero prometo que si encuentro un camino para ganar pasta con esto, dedicaré un buen porcentaje en apoyar a las organizaciones que luchan por mejorarlo un poco.

Lección 2: aprender a retirarse

Ayer estuve jugando dos horas y media al poker y gané 2$. Hasta trabajando en Carrefour se gana más pasta. Ahora bien, en vez de dos, podía haber ganado 7$ si me hubiera retirado a tiempo. El problema es que no sabes cuando es ese momento, no me di cuenta que la mesa cambió y que ya no estaba jugando contra los mismos jugadores, alguno de los nuevos eran mejores que yo... y se llevaron 5 de mis dolares duramente conseguidos. La verdad, estaba cansado y cometía más errores de los habituales. Hay que aprender a retirarse.

Para los que se pregunten por qué se gana tan poco, debo aclarar que estoy jugando en mesas en los que los límites son bastante bajos (0.15$ - 0.30$). No ganas mucho, pero tampoco pierdes demasiado. Es lo mejor para aprender. Quizás ahora viene al caso una introducción sobre cómo se clasifican las mesas de poker en relación a la forma de apostar en ella... a mi desde luego me hubiera sido útil esta explicación hace algunas semanas:

En primer lugar tenemos las mesas con límite, en éstas las cuantías de las apuestas están fijadas a una cantidad predeterminada, cuando un jugador sube, sólo puede subir la cantidad preestablecida. Existe un límite máximo, una vez alcanzado ya no se puede seguir subiendo. En el Texas Hold'em (la modalidad de poker a la que juego), las mesas con límite se indican con dos cantidades, p.ej: 1$ - 2$, la primera representa la cantidad predeterminada de la apuesta antes de la cuarta carta (llamada Turn). Una vez se reparte el Turn, la cuantía predeterminada de la apuesta pasa a ser el segundo número, en este caso, 2$.

Después tenemos la mesas con Pot-Limit (algo así como bote limitado). Aquí se establece una cantidad fija, p.ej. 5$. Se puede apostar hasta el doble de la última apuesta realizada y no hay límites máximos (a partir del Turn las cosas cambian un poco, pero esa es la idea básica). No es difícil apostar todo tu capital en una sola partida. Yo empecé jugando al poker en mesas pot-limits, lo que hace la ignorancia. Puedes ganar mucho, pero tienes que saber jugar.

Por último están las mesas sin límite, en cada apuesta puedes poner toda la carne en el asador. Así, si tienes una buena mano, en la primera de cambio puedes apostar todo lo que tengas sobre la mesa... pero no te vayas a equivocar.

Bueno, me voy a jugar un rato... ya os contaré.

Lección 1: no perder la paciencia

He perdido 10$ (la divisa usual en las salas online de poker). Puse en práctica los consejos del libro y, aunque no ganaba, tampoco perdía demasiado. Pero claro, poco a poco iba bajando el saldo. Al final perdí la paciencia, me pasé el libro por el forro y cedí a una naturaleza agresiva que no sabía que tenía. Perdí lo que me quedaba.

Pero bueno, ya tengo la lección en mente. Por cierto, el libro es bastante malo, voy a ver si consigo otro. Tiene un montón de relleno, páginas que no sirven ni para limpiarse el culo... cito un ejemplo, ¿Qué necesitas para jugar al poker online? Una conexión a Internet. Dios!!! Que listo es este tipo. Vale la pena echarle un vistazo, pero no lo compréis.

Por dónde empezar

Reto complicado el que me he impuesto, no parece sencillo ganar dinero de la nada. Y ciertamente, no empezaré de la nada.

Hace unos meses decidí invertir unos 40€ en una casa de apuestas de Internet, mi intención era probar mi suerte en los eventos deportivos y, la verdad, no me fue tan mal. Casi llegué a triplicar mi efectivo inicial. A día de hoy cuento con 80€ y ese será mi punto de partida.

Hará cosa de una semana decidí empezar a probar con el poker online, la verdad es que nunca he jugado seriamente al poker, pero me di cuenta que puede ser una fuente importante de ingresos. Así que me dirigí a la biblioteca y saqué: The Inteligent Guide To Texas Hold'em Poker. También me gasté un buen puñado de dolares de mi cuenta de apuestas en aprender a jugar.

Así que mi primer paso para alcanzar los 800€ será poner a prueba mis habilidades en el poker. Veamos que tal se me da.

Sin más preámbulos, doy por inauguarado este singular reto. Ya os informaré de que tal me ha ido con el poker en mi próximo post.

La rutina del hombre gris

Un día te levantas de madrugada, como llevas haciendo toda la semana, te duchas, te vistes y tiras para el curro sin todavía tener los ojos del todo abiertos. Ya a mitad de camino la mente empieza a ponerse lúcida y entonces piensas: "Ya falta menos para el fin de semana".

Y así un día tras otro... hasta que llega el viernes por la tarde y te despides de los compañeros con una sonrisa radiante: "Buen fin de semana", "Nos vemos el lunes".

Pero el lunes no tarda en llegar... y entonces miras al cielo, te armas de fuerzas y vuelves a empezar... menos mal que todavía no has gastado todas tus vacaciones, ya llegarán y descansarás.

Y cuando las vacaciones llegan y se van, las dudas vuelven. ¿Por qué este trabajo? ¿Por qué no puedes trabajar en lo que de verdad te gusta? ¿Por qué este horario? Y entonces tu parte racional te recuerda (si no tienes parte racional te lo recordará tu parienta) que necesitas el dinero. Que esto no es Barrio Sésamo y que Julián no puede ir regalando piruletas al primer puercoespín rosa que pase.

Bueno... el caso es que cierto día estaba sumido en tales pensamientos cuando, de repente, vi la luz. La solución a mis problemas era muy sencilla, sólo tenía que conseguir mucho, mucho dinero. De esta forma podría dedicarme a lo que me gusta, incluso montar mi propia empresa.

Lo primero que se me ocurrió para cumplir mis sueños fue ganarme el euromillón. Prueba de que no lo conseguí es este blog. Ya ni siquiera lo juego. No hacía más que perder un par de euros a la semana. Para que se los lleve el estado que se queden en mi bolsillo.

Pero claro, no me iba a rendir. Me di cuenta que mucha gente había sacado provecho a Internet y se habían hecho con un considerable buen puñado de euros usándolo sabiamente.

Y de eso va este blog. Me he propuesto de aquí a final de año ganar 800€, usando para ello cualquier medio (legal) disponible en Internet. Eso sí, no se trata de trabajar a través de Internet, eso no tiene gracia, se trata de aprovechar lo que te ofrece con el fin de que, sin dar golpe, tengamos alguna que otra ganancia.

Ya os iré contando más detalle en los siguientes posts... hasta entonces no olvidéis que trabajar no es saludable.